Preparar el corazón para Dios
(por el Padre Luis Tamayo)
PREGUNTA: ¿Qué es la Navidad?
Hay muchas formas de decir lo que es la Navidad, pero leyendo el evangelio de hoy podríamos decir que la Navidad es la forma en que Dios quiso hablar al corazón del hombre.
PREGUNTA: ¿Os gusta la Navidad?
Hay gente que dice que no le gusta la Navidad, a mi me encanta! La Navidad es un tiempo entrañable, me gusta cantar villancicos, entrar en las casas y ver el belén puesto con luces, etc.
LA NAVIDAD ES UN TIEMPO QUE NOS HABLA AL CORAZÓN. Las familias que viven fuera se reencuentran, hay besos y regalos. Todo esto es una forma de hablarnos al corazón. Todos necesitamos que nos hablen al corazón. Por ejemplo: cuando uno ve una película de amor… y el actor, el guapo de turno, le dice a la mujer… “te quiero"... y uno ya se emociona.
Para los más viejos la escena final de la película “Lo que el viento se llevó”… Vivien Leigh y Clark Gable… el se marcha y ella le dice “Red ¿dónde vas? llévame contigo… Red, yo sólo se que te quiero”. O para los más jóvenes la película de “Titanic” con Leonardo DiCaprio y Kate Winslet… cuando están en el barco y el le coge de las manos a ella y se ponen como a volar con el aire del mar… no hay palabras es sólo un gesto, pero un gesto que habla al corazón…
El hombre necesita que le hablen al corazón, nosotros necesitamos que nos hablen al corazón…
PREGUNTA: ¿Vosotros creéis que Dios ha hablado a los hombres a lo largo de la historia?
Mirando toda la historia en la Biblia, Dios siempre ha hablado a los hombres, pero parecía que no les llegaba al corazón. Al fin al mandó a uno que se llamaba Juan… Dios envió a un hombre llamado Juan, este venía como testigo, para dar testimonio, para que por él todos vinieran a creer en Dios.
Le preguntaron: ¿Tú quién eres? El dice: Yo no soy el Mesías. ¿entonces quien eres? Le volvieron a preguntar: ¿eres Elías?, ¿eres un profeta? Entonces Juan responde: Yo soy una voz que grita “prepararle el camino al Señor Jesús”, es decir, prepara el corazón, estate atento, no dejes que se te pase esta oportunidad… Estas navidades son especiales… pues ahora Dios, en estas Navidades, quiere hablarte al corazón para que le podamos entender bien.
PREGUNTA: ¿cómo preparar el corazón en estas Navidades?
La mejor preparación es un poco de silencio, pues fue en el silencio de la noche donde Dios pronunció su Palabra, fue en el silencio de la noche donde el niño Jesús nació, fue en el silencio de un día normal donde Dios le habló a María, fue en el silencio del desierto donde los reyes magos vieron la estrella guiándoles hacia Belén, fue en el vacío de la nada donde Dios pronunció la creación…
Dios al hablar al corazón del hombre no usa sólo palabras sino que también son gestos: es el gesto del Misterio de la Encarnación donde:
- todo un Dios Omnipotente, todo poderoso y lleno de Gloria se hace un bebé, se quita todo el poder y se hace accesible y cercano
- todo un Dios Supremo y Altísimo se hace niño, se hace necesitado de calor, de unas manos, de cariño.
- todo un Dios Soberano y lleno de Gloria en el cielo, se pone en las manos de la gente y se deja manejar.
La sencillez de un niño es lo que toca el corazón, es lo que baja barreras, es lo que conquista al más duro hombre.
En Filipinas en 1986 se vivía mucha opresión y pobreza, el pueblo se lanzó al asalto del Palacio presidencial. El Presidente Marcos rodeó el edificio de tanques y soldados. Estaba el pueblo frente a los soldados… la situación era muy tensa pues tenían ordenes de disparar si la gente avanzaba. En medio de todo esta situación de tensión, miedo, violencia… hubo un hecho histórico que cambió el curso de la historia… una niña se puso a andar y se acercó a uno de los tanques… llevaba una flor en la mano… el soldado salió y tomo la flor… detrás de ese gesto, muchos otros empezaron a hacer lo mismo… llevaron flores a los soldados. La tensión se bajó. El pueblo no llevaba la guerra en el corazón, no llevaban violencia… esto hizo ajar las armas a los soldados… y se pasaron al lado del pueblo.
El corazón del hombre, nuestro corazón esta lleno de dureza, de rencores, resentimientos, envidias, cansancios… pero estas Navidades te invito a que mires a Dios en el niño Jesús, no es una flor la que lleva sino es un gesto de cercanía, de cariño, de mucho amor. Y mirando a Dios hecho un bebe a uno se le derrite el corazón. Tan pequeño por que no quiero que me tengas miedo, por que quiero que te acerques, para que bajes toda barrera. Y defensas.
Para entender bien a Dios, necesitamos que nos hable al corazón, pues las palabras solas entran por una lado y salen por el otro.
Por eso la Navidad es el lenguaje de Dios hablando al hombre al corazón. Dios quiere hablarnos de forma que le podamos entender y la mejor forma en le que podemos entenderle es hablarnos al corazón. Pues a Dios lo que le interesa es el corazón del hombre.
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