3 may 2009

Jornada Mundial de oración por las vocaciones

Yo soy el Buen Pastor

El evangelio está lleno de imágenes para hablar de las realidades de la fe, las imágenes son un camino pedagógico para ayudarnos a comprender las realidades de la fe.

La imagen que el evangelio de hoy (Jn 10, 11-18) utiliza es la imagen de Jesús como el Buen Pastor y la Iglesia como su redil de ovejas.  Esta imagen viene a explicar la realidad del Amor de Dios que no sólo no abandona a sus hijos, sino que a demás les conduce por el buen camino.

El Salmo 23 dice: El señor es mi pastor, nada me falta. Por prados de fresca hierba me apacienta.  Y más adelante dice: Aunque pase por valle tenebroso, ningún mal temeré, por que tu vas conmigo.

Rezar con el salmo 23 es hacer la experiencia de Dios como mi pastor, aquel que me conduce, me guía, y por pura gracia no ha permitido que me extraviase… pues a pesar de tener una edad rebelde en la adolescencia y de dejar de practicar la fe, al final no me perdí.  Jesús el Buen Pastor supo rescatar a su oveja perdida.

Yo me identifico con Santa Teresa de Avila cuando escribe: Vuestra soy, pues me criasteis, vuestra, pues me redimisteis,
vuestra, pues que me sufristeis,
vuestra pues que me llamasteis,
vuestra porque me esperasteis,
vuestra, pues no me perdí.


Pero Jesús no es sólo Pastor, sino que es Buen Pastor. Bueno pues nos invita a hacer la experiencia del amor incondicional de Dios que nunca nos abandona.  Veíamos en el salmo 23 que dice: Aunque pase por valle tenebroso, es decir, aunque me enfrente a situación difícil, por dura que sea… ningún mal temeré, por que tu vas conmigo.  Es lo que San Pablo dice en sus cartas: todo ocurre para bien de aquellos que aman al Señor.

Uno se puede preguntar ¿cómo Dios hace real su amor incondicional por mi vida? y son muchos los detalles que uno pudiera contar uno a uno.  Pero uno que es obvio, no se si lo habéis pensado alguna vez, su amor se hace visible y palpable a través de los sacerdotes.  La tradición de la Iglesia dice: Dios, pensando en muchos, llamó a unos pocos. Es decir, que Dios pensando en ti y en como alimentar tu fe desde la Palabra y la eucaristía,  llamó a personas para hacerte visible su amor de Buen Pastor.

Jesús, el Único Sacerdote, ha decidido instaurar su eterno sacerdocio a través de sus pastores, que somos nosotros los sacerdotes.

La vocación es iniciativa es de Dios… uno ha de responder… pero es Dios que por amor a vosotros escoge a personas para hacer ese amor palpable y visible.  

Yo, hoy os pediría varias cosas:

Rezad por vuestros sacerdotes, pues en la sociedad de hoy recibimos mucha crítica: un día escuché a un sacerdote mayor, con mucha más experiencia que yo, que decía: el sacerdote siempre va a ser objeto de crítica; si el sacerdote va con mujeres, le llaman mujeriego; si va con hombres, le llaman gay; si no tiene coche, le llaman tacaño, y si tiene coche, despilfarrador…

Tener mucha tolerancia con vuestros sacerdotes, pues somos humanos como cualquiera, y también cometemos fallos.  Hay días que son buenos y otros que son malos.

Y sobre todo cuidar a vuestros sacerdotes, especialmente cuando se hacen mayores, ir a visitarles, escucharles… pues un día se entregaron por vosotros y cuando llegan a la edad madura experimentan la soledad de cualquier anciano.

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